que lo atacaba, pero cuando él, cuando él mostró la estrategia, como el político que venía, diciendo lo que tú estás diciendo ahora. Que Di, que santo domingo, que las, que las, que las cañadas, que los, que los espacios verdes, que la, que el tránsito, que la, que la organización de Santo Domingo Este y la, y la, y la, y la transformación que hay que darle a Santo Domingo Este, la gente se conectó con eso.

Y ahí es que uno ve la importancia de tener líderes comunicadores que cuando, cuando, cuando, cuando hablan, conectan con la gente. El político tradicional llega, se rodea de sus seguidores, llega, hace su discurso, se va, y no conecta. En cambio tú conectas con la gente.

Y por eso es que, es que, es que, es que, es que, es que, es que nosotros hoy estamos aquí, hablando de Di Taso. Ahora, vamos a lo importante, y es que, el jueves, como habíamos anunciado, se produjo una reunión en Miami. En Miami se reunieron hombres que son protagonistas de la política nacional, pero que además son amigos, son hermanos, son de los que cuando se saludan, se abrazan. En esa reunión, Papá, Hipólito Mejía y Miguel Vargas Maldonado acordaron reunirse hoy aquí, en El mañanero.

Y aunque esto parece sencillo, porque se trata de una reunión que tú convocas, de algo que tú estás haciendo con tus amigos, no es tan sencillo. No es sencillo porque por años, estos hombres han estado en trincheras distintas. Y no solo en trincheras distintas, sino que además, en momentos de confrontación dura. Ellos han tenido una relación de, de, de confrontación dura. Pero hoy, estos hombres, con todo lo que eso significa, se van a encontrar aquí, en El mañanero, para hablar de sus aspiraciones políticas.

Papá, aquí se puede hacer historia, porque nosotros hemos sido testigos de los hechos que nos han llevado a aquí. ¿Qué opinas tú? Bueno, bueno, bueno, yo quiero que me hagas un recuento de lo que fue la vida política de estos hombres. ¡Claro! Y eso es lo que estamos haciendo aquí. Miguel Vargas Maldonado es uno de los hombres más importantes de la política dominicana. Fue presidente de la República, fue presidente de la cámara de diputados, fue presidente del partido revolucionario moderno.

¿Por qué no te gusta llamarlo PRD? Bueno, porque yo no soy un político tradicional. Soy un comunicador. Y en el análisis político, como el que estamos haciendo aquí, tú tienes que cambiar los conceptos, las visiones, para que la gente lo entienda. Porque si yo digo que Miguel Vargas Maldonado fue presidente del PRD, hay una generación que no lo recuerda. Tú tienes que conectar, tú tienes que explicar, tú tienes que decir, tú tienes que decir que Miguel Vargas Maldonado es el hombre que creó el PRM.

Sí, bueno, bueno, entonces, Miguel Vargas Maldonado fue presidente de la República, fue presidente de la cámara de diputados, fue presidente del partido revolucionario moderno, pero además, fue un hombre que nunca dejó de tener un diálogo abierto con los sectores políticos.

Eso es importante, porque eso es lo que te va a llevar a tomar decisiones, a hacer acuerdos. Porque si tú tienes una posición de confrontación, tú no avanzas. Entonces, Miguel Vargas Maldonado ha sido un hombre que ha mantenido un diálogo abierto. Hipólito Mejía, por su parte, fue presidente de la República, fue presidente del partido revolucionario dominicano, fue secretario de estado de agricultura, fue un hombre que, además, en el gobierno de Leonel Fernández, fue un hombre que tuvo una confrontación directa con Leonel Fernández.

¿Por qué? Porque Hipólito Mejía, en el gobierno de Leonel Fernández, hizo lo que tú dices que es el liderazgo político. ¿Por qué? Porque Hipólito Mejía, en el gobierno de Leonel Fernández, se enfrentó a Leonel Fernández. Pero no se enfrentó a Leonel Fernández por una confrontación personal, se enfrentó a Leonel Fernández porque Hipólito Mejía estaba convencido de que lo que Leonel Fernández estaba haciendo, estaba mal. Y eso es importante, porque eso es lo que te lleva a la confrontación política.

Y eso es lo que nos lleva a aquí. Miguel Vargas Maldonado y Hipólito Mejía, dos hombres que han tenido una confrontación política, pero que hoy se sientan aquí, en El mañanero, para hablar de sus aspiraciones políticas.